RESEÑAS DE CONCIERTOS ALREDEDOR DEL MUNDO


Unos y otros son conciertos alrededor del mundo, a los cuales hemos ido y consideramos reseñar por mero gusto. ¡A su salud! Una felicitación a todas las bandas, músicos, artistas, estudiantes y todas las personas comúnes involucradas en estas cosas.Luz y música, electricidad y etcéteras.


THE ROLLING STONES & CAIFANES
Ciudad de México, Ex-Autódromo Hermanos Rodríguez-Foro Sol.
14 de enero de 1994.
Texto: A.G.F., México 3 de abril de 2003.

El planeta Tierra estaba dando vueltas, por el mundo estaban pasando muchas cosas, que por esos momentos en lo personal no estaban en mi cabeza. Se vivía el mero levantamiento de los EZLN, el país se conmocionaba (sí se conmociona, pero no hace nada al respecto), por lo que la política y las historias terribles de narcotráfico, delincuentes, etc rondaban, etc. Pero esa noche, salí de mi casa en Cuernavaca con mi madre. Días antes la mamá de uno de mis mejores amigos, compró los boletos en el aún existente sistema de boletos para conciertos caros. El mero día nos dispusimos a irnos todos por nuestra cuenta al D.F. con rumbo al ex autódromo Hermanos Rodríguez. Ya en el metro se notaba la banda, las camisas, las tazas, "...llévelo, llévelo...", la sonidera de los conciertos es una sensación bastante folklórica y de buen humor. Entre los asistentes, hay todo tipo de personajes (y eso es bueno), habíamos adolescentes, niños, adultos y ancianos que se hacen pasar por buenos y son requetemalos, viceversa. El concierto estaba empezando, bajamos del metro, corrimos para encontrar a nuestros amigos y los boletos. Por fin llegamos, nos metimos. Recuerdo bien que las gradas del ahora Foro Sol, eran como de un circo, pero enormes. Tablas y tablas de madera, una sobre otra en un esqueleto de varillas y tubos. El número de aficionados que asistimos al primer concierto de los Rolling Stone en México no lo tengo a la mano, pero éramos un chingo. Ya en pleno stage, los Caifanes hacían su aparición, Saúl Hernández, Alejandro Marcovich, Sabo Romo y Alfonso André hacían de las suyas. A pesar de que siempre hay gustos y preferencias, habíamos desde los que queríamos ver también a Caifanes, hasta los que no les conocían, etc. Pero en pleno griterío, sonaron "La Negra Tomasa", "Viento", "Nubes" y otras. Uno de los mejores conciertos para el currículum de los hasta ese entonces Caifanes. Luego vino el turno de los "viejitos". Una de las bandas de rock más viejas del mundo, estaba pisando tierra mexicana (así de emocionante que ha de ser pisar por primera vez Jamaica, Estonia, Rusia, Perú, China o cualquier país). Mick Jagger salía al escenario, ya con sus años encima, sus buenos nervios y todo. Se puso a cantar, a bailar, a corear, etc. Suena emocionante. Sonaron: "Satisfaction", "Let's Spend the Night Together", etc. Un concierto de lujo, The Rolling Stones con obra maestra interpretaron a gusto su sonido, se dieron una fiesta ante miles (no sé cuántos) de curiosos fanáticos y no fanáticos de ellos. Una historia verídica, señoras y señores, una de las bandas más chingonas del mundo, estaba en México. Ahora ya han tocado un par de veces más, pero la primera es la primera. En palabras del escritor José Agustín: "En México han estado en dos ocasiones y se han visto llenos de vida, con toda la energía rocanrolera y toques verdaderamente poéticos, como el espacio para tocar ondas acústicas, más íntimas. Ahora se preparan para otra gran gira más con un disco enteramente nuevo, lo cual sin duda es un gran riesgo, pues sería patético que las Piedras acabaran su longeva vida con un disco de baja calidad. En todo caso, es admirable la persistencia de los Stones, que sin duda se han convertido en uno de los grandes mitos de la cultura contemporánea. Ahora hasta Mick es lord. Los experimentos en solitario de casi todos ellos, si no fallidos tampoco geniales, demuestran que el grupo es una unidad cohesionada, firmemente estructurada, con vida propia, en la que predomina el espíritu de grupo por más payasadas que hagan para llamar la atención los extrovertidos. No hay ni Jagger ni Richards ni Wood ni Watts sino The Rolling Stones, la banda de rock más grande del mundo. ". Más datos es que en 1994 el Voodoo Lounge Tour, está documentado en un video dirigido por Daniel Zirilli.

Mi cámara en el Sónar
FESTIVAL SÓNAR 2002 (de día y de noche)
Barcelona, MACBA-CCCB-Centre D'Art Santa Mònica-Polígono Pedrosa.
del 13 al 15 de junio de 2002.
Texto: A.G.F., México 3 de abril de 2003.
Foto: A.G.F., Barcelona Sónar de noche 15 de junio de 2003.

Puro placer auditivo. La sensación del Festival Sónar la había sentido desde hace muchos años sin haber estado ahí, curiosamente desde que comencé a adquirir la revista española Rockdelux mi pasión por la música experimental y avantgarde se volvió una manía consuetudinaria. Hasta la fecha, tengo contabilizados 4 años sin interrupciones de adquirir la revista para enterarme de la crema y nata en España, así como lo mejor que se produce a nivel mundial en géneros musicales como acidjazz, electrónica, ambient, rock y pop. La imagen que utiliza este año el festival ha sido bien aclarado, ya que la imagen es una área más del festival. Siempre sorprendentes, sus motivos visuales se alejan de los lugares comunes de la iconografía relacionada con la música electrónica, y en su edición de 2002 es Diego Armando Maradona, todo un mito universal, quien representa a Sónar coincidiendo con la celebración simultánea del Mundial de fútbol en Japón y Corea. Ahí les va un poco de choro. Para mí, el Sónar era una especie de festival donde se reúnen anualmente los más representativos artistas de arte multimedia y música de avanzadas, tal y lo dicen las descripciones de los organizadores. Este festival ha tenido 9 años de exitosas realizaciones anuales desde 1994 en la ciudad de Barcelona. La lista de artistas que han pasado por los escenarios del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA) y los escenarios de Montjuic es excepcional para melómanos como yo. Comenzando con el sonido abrupto de los creadores del techno Jeff Mills y Juan Atkins, quienes han repetido más de cuatro años dj sets diferentes con contundentes beats sazonados con estridentes manipulaciones sonoras de este género electrónico, que para mal en México es conocido como “punchis punchis”, pero esa errónea definición y prejuicio se debe a la falta de apreciación que tiene la gente con un género musical contemporáneo. La música techno ha tenido una efervescente escena alrededor del mundo desde los últimos diez años, pero para los investigadores y pioneros del género, los artistas menos recordados han sido Pierre Henry y Varèse con su música concreta creada en 1930 con conexiones entre Nueva York, Ámsterdam y Paris. Además de la manipulación sonora visual que realizaba John Cage, el creador del dubbing King Tubby, el colectivo español Zen en 1970, el minimalismo acústico de Steve Reich o la primera banda electrónica Kraftwerk. Actualmente, la historia de la música electrónica se ha ido ampliando, han ido apareciendo nuevas tendencias, viejas influencias, nuevos y viejos discos que amplían la dimensión a este género. Además de que reconozco que existen buenas y malas canciones. Por lo general, la música electrónica se deriva de sonidos creados a través de sintetizadores, samplers de ruidos o clips de audio grabados y reproducidos a través de computadoras, además de cajas de ritmo y secuenciadores. La esencia en el Sónar para este 2002 fue excepcional, yo me encontraba con las ansias más paranoicas y esquizofrénicas que hubieran existido para asistir a este evento, ya dentro de él, con mi gafete de prensa y con el apoyo de la revista electrónica Urbe01, tuve acceso a artistas de renombre y sobre todo escuchar y ver atentamente lo que se está haciendo con nuevas tecnologías en materia de instalación en la sección Sonarmática, videoarte en Spatial sounds, performance, live acts y sellos discográficos en el Sonar Village, Sónar Dome, Sónar Lab y Sónar Complex. Todo comenzaba ese 13 de junio de 2002, un caluroso día por las calles de Barcelona en el barrio El Raval, caminando por la ciudad encontrándome amigos, gente famosa, corresponsales de la BBC Radio 1, MTV, medios alternativos y sobre todo artistas. La lista de artistas contemporáneos fue totalmente de mi agrado, ya dentro del MACBA, los alemanes Lali Puna pudieron ejecutar perfectamente el sonido indietronic que los diferencia de todas las bandas de rock en la actualidad en el escenario Sonar Village, incluso Johnny Greenwood de Radiohead ha declarado su afición a la música de esta banda berlinesa. Otra de las bandas que más me impactaron fueron los fineses de Pan Sonic, quienes junto a la norteamericana Peaches, ejecutaron una sesión de una hora de intenso cyberpunk, ruidismo sónico, guitarras distorsionadas y un show erótico bizarro por parte de la exuberante Peaches. Una ola de aromas a hashisch, marihuana, gente extasiada y suficientes personajes extravagantes presenciaron a este dúo que manipuló máquinas que producían sonidos de avanzada y ritmos muy extraños. Una odisea de sesenta minutos con la manipulación del sonido estéreo. Bueno, los artistas musicales que presencié todo o poco fueron por orden del festival: Yasunao Tone, Pet Shop Boys, Slam, Arto Lindsay, Dj Krush, Radio Boy (me volví loco en esta parte, fue de lo que más me gustó), Arthur Baker, Crossover, Ellen Allien, Modeselektor, Fantasías Animadas, Bonobo, The Cinematic Orchestra, Tuxedomoon, Pan Sonic + Peaches, Murcof (mexicano a la altura de los buenos músicos), Manitoba, Kid606, François K., Manual, Lali Puna, FiftyFifty vs Ooze.bâp, Luomo, Roger Sanchez, John Digweed, Yo la Tengo (cine surrealista de Jean Painleve con música en vivo desde Nueva York), Lamb, Funk D'Void, Soul Designer, John Tejada (bailé y bailé techno sabrosón), Nikakoi, Tiga, Dntel, Doctor L, Safety Scissors, D'Wachman, Layo & Bushwacka, Jeff Mills, S.I. Futures, Richie Hawtin, Carl Cox (aquí reventaron miles de ravers), Oscar Mulero, Mr. Scruff (sabor Ninja Tune en tornamesas y harto funk), Anti Pop Consortium, Earthbound, Kirk Degiorgio, Ian O'Brien (magia y más magia), Wagon Cookin', J.L. Magoya y Catering Deneuve, que hasta el final dejó sonar un disco Alaska y Dinarama, ya estábamos en pleno recién comienzo del día. Ah! Qué días, qué noches. El sónar vale la pena y lo volvería a repetir. Lástima que no está a la vuelta de la esquina, habrá que volver a Barcelona. Del 13 al 15 de junio del 2002, me divertí de lo lindo, di vueltas por todos los espacios del Sónar, al fin estaba ahí, bailando y todo, como se debe.